Hacer un video para las redes sociales, es un elemento importante de cualquier estrategia de marketing integral. Cada vez más, los usuarios esperan ver videos y muchas plataformas te ofrecen un lugar para compartir tu contenido.
Nunca ha habido una mejor oportunidad, para comenzar a aprovechar el video para las redes sociales. Estas plataformas desempeñan un papel fundamental para compartir tu contenido. Es importante que te asegures de que el contenido de tu video esté configurado para el éxito, tanto estratégica como técnicamente.
Antes de continuar, si lo prefieres puedes ver este contenido en video:
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Comienza con una base sólida
Independientemente del canal en el que compartas tu video para las redes sociales, es importante tener una estrategia sólida para respaldarlo. Si bien puede parecerte apropiado subir videos en todas las plataformas, para generar la mayor conciencia de tu contenido, hay mucho trabajo involucrado para hacerlo bien.
Cada plataforma tiene pautas únicas o mejores prácticas para el video, y algunos tipos de contenido pueden funcionar mejor que otros según el canal. De ahí la importancia de tener una estrategia completamente desarrollada, para informar tus esfuerzos de marketing de video para las redes sociales. Una estrategia integral te dicta qué canales vale la pena utilizar para llegar a tu audiencia y qué tipo de contenido cargar en cada uno.
Optimización de un video para las redes sociales
Los canales de redes sociales se actualizan de forma regular, y puede resultar difícil hacerle seguimiento a las prácticas recomendadas al hacer un video para estas plataformas. Aplica estos consejos en cada una de ellas, para aprovechar al máximo tu contenido de video, independientemente de donde lo estés subiendo.
1. Hazle siempre seguimiento a los análisis
Al igual que tu sitio web debe atender a los usuarios, tus videos deben atender a tus espectadores. Al hacer el análisis de un video para las redes sociales, comprende qué contenido tiene el mejor rendimiento y qué plataformas están produciendo los mejores resultados.
Los datos de tus espectadores te ayudan a determinar en qué contenido invertir y qué dejar de producir, debido a su bajo rendimiento. También te indica cómo los usuarios ven tus videos y los cambios a realizar en el formato.
Información como la tasa de retención, o el tiempo que un espectador mira un video, te ayuda a decidir qué contenido priorizar. De manera similar, usa los datos del dispositivo para determinar qué formato darle a tu video para las redes sociales, en función de dónde los usuarios lo ven.
2. Elige la relación de aspecto correcta
La relación de aspecto de un video está directamente relacionada con sus dimensiones. Esta relación es, a menudo, una decisión creativa importante en la realización de películas, pero es igualmente importante para un video para las redes sociales.
Para garantizar que los aspectos principales y el video se vean bien, elige la relación de aspecto correcta para cada plataforma. Para la mayoría de las plataformas, el formato 16:9 (una resolución de 1920 por 1080 píxeles) es muy útil. Esta es la relación de aspecto estándar para YouTube, un televisor o la mayoría de las salas de cine.
Sin embargo, no todas las plataformas son las más adecuadas para una relación de aspecto de 16:9. El video vertical funciona mejor en Snapchat e Instagram, donde se ha agregado una funcionalidad de historia similar a LinkedIn, Facebook y X.
Para aprovechar mejor la función de historia en estas plataformas, usa una relación de aspecto de 9:16. Si al estudiar tus análisis, descubres que se consume más contenido a través de los dispositivos móviles, es preferible la relación de aspecto 1:1.
Esta proporción es un cuadrado perfecto, lo que lo hace ideal para las plataformas de redes sociales que se reproducen automáticamente en el feed. Un video con una proporción cuadrada rara vez, o nunca, se recorta en los dispositivos móviles. Por lo tanto, no requiere ninguna participación del usuario para evitar la pérdida de detalles o contenido.
3. Súbelo de forma nativa siempre que sea posible
Aunque depende de la plataforma, la mayoría de los algoritmos de redes sociales favorecen las cargas nativas. Es poco probable que un video alojado en otra plataforma, funcione tan bien como uno cargado directamente.
Las cargas nativas, generalmente ofrecen mayores beneficios, incluida la función de reproducción automática. Dicho esto, cada plataforma tiene especificaciones únicas de tamaño de archivo, resolución, tiempo y más. Dado que optimizar cada video para las redes sociales puede llevarte mucho tiempo, es importante recordar qué plataformas se adaptan mejor a tu estrategia.
A medida que las cargas nativas se vuelven más comunes y las especificaciones de carga siguen siendo diversas, son necesarias las herramientas avanzadas de edición de video. Ofrecen funcionalidad o complementos de terceros, que ayudan a preparar automáticamente archivos de video y eliminan parte del trabajo manual.
4. Planifica tus videos sin sonido
La reproducción automática es un beneficio de la carga de forma nativa, pero es probable que el video se reproduzca sin sonido a menos que el usuario elija reactivarlo. Por esta razón tus videos deben funcionar sin sonido.
Si colocas detalles importantes en el audio en los primeros segundos del video, es posible que no funcione bien en las redes sociales, y especialmente en los dispositivos móviles. Para que un video para las redes sociales sea accesible, escribe subtítulos precisos, o títulos o elementos visuales que llamen la atención y que inciten al usuario a activar el sonido.
5. Capta la atención desde el principio
Existe una enorme cantidad de contenido en las redes sociales y para destacarte del ruido, es importante captar la atención del espectador durante los primeros segundos. Para retener a los espectadores y tener más éxito en el uso de un video para las redes sociales, concéntrate en el tiempo de reproducción automática para captar la atención. Además, atrae a los espectadores con imágenes poderosas o conclusiones clave.
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